El sistema de salud privado de Chile conformado por las Isapres que son aseguradoras de salud, ha sido uno de los más estudiados del mundo por su eficiencia y prestaciones. Ahora hay algunas problemáticas a resolver pero aún así sigue siendo un sistema modelo en protección de la salud.
Las aseguradoras de salud que protegen a cientos de chilenos por medio del régimen privado están pasando por un período difícil y acumulando pérdidas millonarias. Tantas que, de no frenarse o de no ser intervenidos tales fondos con el beneplácito del Gobierno, terminarían en la quiebra, en el colapso de la atención médica de los asegurados, así como en negativos efectos en la economía del país.
Desde medios locales se han evidenciado las altas pérdidas que han tenido las Isapres, como son conocidas las Instituciones de Salud Previsional de Chile. A esta situación se le suma la deuda que estas organizaciones tienen con las clínicas, una suma que asciende a 500 mil millones de pesos chilenos, confirmó el presidente de Clínicas de Chile, Gonzalo Grebe.
A pesar de esas vicisitudes, el sistema privado de salud de Chile es uno de los mejores del mundo y los expertos creen que por esto seguirá funcionando durante muchos años más.
Los centros de salud pública se han visto obligados a habilitar plantas de generación eléctrica propias y camiones cisterna, pero son soluciones “coyunturales” por “corto tiempo”, subraya el informe.
Una de las principales isapres, Isapre Consalud se desmarca del resto y ha generado durante años ganancias por encima del promedio anual.
Según publica Bloomberg, alrededor de 3,1 millones de chilenos, es decir, cerca de un 16 % del total de afiliados, son los que están en riesgo, por las deudas de las isapres si es que no se encuentra una salida para recuperar las Isapres, lo que podría generar un desbordamiento en el sistema de salud, aún mayor del que ya se estaría sufriendo.
La grave situación de deuda en la que se encuentran las aseguradoras se remonta, entre otras situaciones, a una decisión de la Corte Suprema en 2020, luego que desde el gobierno de Piñera se ordenara una regulación de precios hacia las aseguradoras privadas, por lo que estas tuvieron que empezar a devolverles dinero a sus afiliados, según recordó el medio citado.
Desde 2020, cada año las aseguradoras han tenido que devolver millones por orden de la Corte Suprema, lo que ha recabado su economía y ha hecho que, paralelamente, cada año aumenten su deuda y dejen de lado otras obligaciones económicas.
En el mes de Enero de cada año, las Isapres deben devolver, en efectivo, los excedentes que las personas afiliadas acumularon en sus cuentas individuales producto de la diferencia que se origina cuando la cotización legal obligatoria del 7 % es superior al valor del contrato de salud. Estas precisiones las detalló el Superintendente de Salud de Chile, el Dr. Víctor Torres.
Otro de los hechos que aumentó la deuda para las Isapres fue la suspensión de pago de planes de salud para menores de dos años desde el fallo de la Corte Suprema, por lo que estas empresas privadas estarían atendiendo a estos pequeños sin otras entradas de dinero.
Ante este panorama, se le ha pedido al Gobierno nacional que apoye unos acuerdos de pago que permitan la recuperación económica del sector privado, mientras se mantiene la atención en salud de los asegurados y se van cumpliendo los compromisos monetarios a largo plazo.
“Lo que nosotros pedimos es que en esta propuesta de ley también se incluya el tema de los prestadores, porque la única manera de que esta crisis no llegue a los pacientes, que es lo que todos quieren evitar, es que este riesgo de continuidad operacional, dado por el no pago de las deudas, y esta crisis de liquidez, se incluya como elemento en la discusión legislativa”, afirmó Grebe para el medio.
Agregó: “La consecuencia es absolutamente en cadena, porque el problema que se produce frente al colapso de una o más, o todas las Isapres, es que la deuda que se ha contraído en el tiempo tiene que entrar en un proceso de liquidación”, indicando la gravedad de la situación.
Por su parte, el exministro de salud Jaime Mañalich dijo en una entrevista para el medio local Canal País que Santiago estaba en medio de una crisis de deuda que, aunque tiene su epicentro en el sistema privado, no deja de ser una complicación que repercute en la salud del régimen público, por lo que este último ya comenzó a recibir asegurados que antes pertenecían a empresas privadas.
El presidente de Chile, Gabriel Boric, ha anunciado, tras varias semanas de especulaciones, una remodelación de su gabinete y ha destituido de su cargo, entre otras, a la ministra de Exteriores, Antonia Urrejola.
La crisis de servicios de salud
‘’Nosotros estamos en una crisis importante: deudas, contingencia, una demanda por servicios de Salud —que se traduce en listas de esperas en el sector público—, una inseguridad con respecto al financiamiento en el sector privado. En ese contexto, hay dos vertientes: la primera, la que se habló hoy en la comisión de Salud del Senado de Chile (…) ¿Qué hacemos con Fonasa? Fonasa ya está recibiendo cada vez más personas que estaban aseguradas en el sector privado’’, indicó Mañalich haciendo referencia al Fondo Nacional de Salud (Fonasa).
Sin embargo, la situación para las aseguradoras se ha visto ensombrecida por la falta de apoyo del Congreso chileno frente a las políticas de Boric, además del fallo de la Corte Suprema en noviembre del año anterior, con el que se habría negado la negociación presentada para salvar al régimen privado. Por lo anterior, se espera que en próximas ocasiones se llegue a un acuerdo avalado por el gobierno legislativo.
Incluso, este mes, el Congreso nacional negó la reforma que buscaba recaudar el equivalente a 3,6 puntos adicionales del PIB para ampliar el sistema de protección social del país, con una mayor cobertura en el área de la salud, educación y pensiones, propuesta por Boric.
El Congreso informó este 14 de marzo que, desde la Comisión de Salud, se ha propuesto continuar las negociaciones con las Isapres para entregar un proyecto de ley que pueda apoyar al régimen privado en su recuperación. “Mientras las aseguradoras plantearon sus posturas sobre ‘que la sentencia no las obligaría a devolver excedentes’, exautoridades de salud y parlamentarios hicieron un llamado a ‘cumplir todo el fallo’ que emitió la justicia”, explicó el órgano legislativo.